(Waka Noticias. Puerto Ayacucho, 12/01/2021).- El único Hospital de Puerto Ayacucho, pudiera quedarse solo con los pacientes en los próximos días, por la renuncia masiva de médicos y enfermeras ante la falta de gerencia efectiva y salarios justos para el personal, según lo manifestado por el personal de esta institución.

Especialistas en el área de cirugía, traumatología y anestesia, anuncian el colapso de sus operaciones generado por lo que ellos califican como “mala gerencia y mal trato” por parte del director del hospital José Gregorio Hernández, además de los bajos salarios y la falta de incentivos, ante las exigencias extremas en el ejercicio de sus funciones.

Según la entrevista sostenida la mañana de este lunes, con la directora del hospital José Gregorio Hernández, doctora Diana Oberto, después de una reunión conjunta con médicos especialistas en cirugía, traumatología y anestesia, entre ellos, el cirujano Jhonatan Tejera, cirujano plástico Aida Ferrer, traumatólogo Edward Alcalá, traumatólogo José Gregorio Hernández, traumatólogo Yaroslaw Zuarich y el anestesiólogo Wilber, Oberto manifestó en exclusiva para  Waka Noticias “los médicos ven frustrados sus intentos en buscarle una solución negociada a la situación que viven” con autoridades de la Gobernación, Alcaldía y Recursos Humanos de la Dirección Regional de Salud, quienes habían sido previamente convocados a una de las salas de quirófano del hospital José Gregorio Hernández, para plantear las inquietudes y problemas que se presentan en el recinto hospitalario con la gerencia del doctor Humbert Mirabal. Tomando en cuenta que estas autoridades no asistieron para escuchar los planteamientos del personal médico especialista, decidieron informar a través de ella, los problemas que han venido anunciando desde hace más de un año en la mencionada institución médica.

Según los especialistas, vanguardia de la atención médica en el hospital José Gregorio Hernández, el director del dispensario, ha venido asumiendo una actitud “hostil y peligrosa”, ya que son reiteradas sus acciones en sabotear el buen desempeño de los médicos, en el ejercicio de sus labores, bien sea en las intervenciones quirúrgicas de emergencias o en algunas intervenciones de carácter planificadas, como es el caso de limitaciones para la entrega de medicamentos o material quirúrgico para los pacientes, poniendo en duda de manera constante la ética profesional de los médicos intervinientes, por presumir que se puedan robar los medicamentos. Además, comentaron que, en algunos casos de intervenciones quirúrgicas planificadas las ha interrumpido el mismo día de manera caprichosa, bien porque él necesita el quirófano o simplemente niega la posibilidad de hacerlas, presumiendo que los médicos cobran a los pacientes dichas intervenciones.

Además del trato del director con los médicos especialistas, manifestaron que las condiciones laborales, no están dadas en el hospital, como por ejemplo no tener baño o lugar de descanso durante las horas de guardia. Así también, como exigirles a los médicos un tiempo mayor al estipulado en horas de guardia, sin el debido reconocimiento a la labor prestada por esas exigencias laborales y mucho menos el incentivo correspondiente a un justo salario. También indicaron que, en medio de la pandemia, a pesar de ser el primer grupo que ha enfrentado la situación de salud en el Estado, no se les ha tomado en cuenta a algo tan sencillo como tener la preferencia para el suministro de gasolina a su vehículo o en algunos casos el apoyo a el complemento de su alimentación diaria con las bolsas de comida.

Ante estas exigencias, los médicos manifiestan que se pone en riesgo y en peligro la salud de las personas que concurren al hospital José Gregorio Hernández, ya que la actitud negligente del director, en algún caso, pudiera poner en riesgo la vida de un paciente, como es el caso de una de ellas con más de setenta años, que terminó de ser operada con linternas de celulares, debido a una falla de la energía eléctrica en el quirófano, que aún se mantiene.

Finalmente, los médicos conjuntamente con la doctora Diana Oberto, se dieron como plazo el final de esta semana, para concretar una salida a la crisis que vive el hospital José Gregorio Hernández, por lo que esperan que las autoridades competentes tomen una decisión ante sus planteamientos, o de lo contrario anunciarían la renuncia masiva de sus cargos.

Fotografía: Waka Noticias